Letter to President Trump Regarding Venezuela
February 6, 2019
Donald J. Trump, President
United States of America
The White House
1600 Pennsylvania Avenue NW
Washington, DC 20500
“Peace I leave with you; my peace I give to you. I do not give to you as the world gives. Do not let your hearts be troubled, and do not let them be afraid. (John 14:27, NRSV).
Dear Mr. President:
Greetings from Global Ministries, a common witness of the Christian Church (Disciples of Christ) in the United States and Canada and the United Church of Christ.
Global Ministries has been engaged in a relationship of solidarity and accompaniment with the Evangelical Pentecostal Union of Venezuela for more than 60 years. As such, we have walked alongside Venezuelans throughout various moments in the history of that nation. We watched with deep concern the recent news regarding intervention in Venezuela, including the military alternative, there.
As we already stated on a recent communication to you, we are deeply convinced that any US military intervention in Venezuela, or along its border with Colombia, would exacerbate the current crisis. It could bring back the darkest pages in the history of the country when the military overthrew civil governments to install dictatorships and de facto presidencies. Every time Venezuela, or any other country in Latin America and the Caribbean, has suffered a military episode in its recent times, the lives of the poorest and the most vulnerable populations have been severely damaged.
As church leaders who walk alongside marginalized communities, we strongly urge you to refrain from any military or one-sided intervention and to support ongoing alternatives that could affirm the well-being and the right for self-determination of the people in Venezuela. The governments of Mexico and Uruguay just launched a proposal for dialogue between the parties in dispute. This new initiative by Uruguay and Mexico has the objective to restart a dialogue between the parties in dispute there, to avoid any escalation on the political standoff in Venezuela. As a representative of those countries expressed recently, “a new dialogue mechanism is needed to contribute to peace and stability in Venezuela.” The media reports that both governments [Mexico and Uruguay] have adopted a non-interventionist position. For that reason, they have decided to call for inclusive dialogue to solve the delicate situation in Venezuela once and for all. More than ten countries and international bodies, including the United Nations, have already signed up. Other fellow international church and ecumenical bodies such as the World Communion of Reformed Churches, the Latin American Alliance of Reformed and Presbyterian Churches and the Latin American Council of Churches, support the initiative. There will be an International Conference tomorrow in Montevideo, the Uruguayan capital, where those countries and several international organizations will be participating and affirming that initiative.
As people of God, we cherish the integrity of every human being and ask you to seriously commit to a peaceful solution to this situation. We pray that the U.S. will not direct or sponsor a military attack on Venezuela and will instead follow a path of respect, dialogue, and reconciliation with the Venezuelan government and its political opponents. We should be willing to respect and participate in the ongoing international effort to come into a diplomatic and political agreement. We also insist on canceling any unilateral economic sanctions on Venezuela, as that will not serve to any purpose other than to harm those who are already suffering the most. It will also negatively affect the political and social environment that is needed for a peaceful solution for this crisis in Venezuela.
May God guide you with wisdom and discernment both for the people of Venezuela and for all of God’s creation.
Sincerely,
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Rev. Teresa Hord Owens |
Rev. Dr. John Dorhauer |
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Rev. Julia Brown Karimu |
Rev. Dr. James Moos |
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Rev. Angel L. Rivera-Agosto |
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6 de febrero del 2019.
Donald J. Trump, Presidente
Estados Unidos de América
La Casa Blanca
1600 Avenida Pennsylvania NW
Washington, DC 20500
“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón ni tenga miedo (Juan 14:27, Versión Reina Valera 1995).
Estimado señor Presidente:
Saludos de parte de los Ministerios Globales, un testimonio común de la Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) en los Estados Unidos y Canadá y la Iglesia Unida de Cristo en los Estados Unidos.
Ministerios Globales se ha involucrado en una relación de solidaridad y acompañamiento con la Unión Evangélica Pentecostal de Venezuela por más de 60 años. Como tal, hemos caminado al lado del pueblo venezolano a través de numerosos momentos en la historia de esa nación. Hemos atestiguado con profunda preocupación las recientes noticias relacionadas con la intromisión de nuestro país en los asuntos de Venezuela, incluida la alternativa militar entre ellas.
Ya le hemos comunicado anteriormente a usted que estamos decididamente convencidos de que cualquier intervención militar desde los Estados Unidos en Venezuela, ó a través de la frontera con Colombia, exacerbará la crisis actual. Esto muy bien puede colocar al país en el umbral de los días más siniestros de su historia cuando los regímenes militares derrocaron gobiernos civiles para instaurar dictaduras y presidencias de facto. Cada vez que Venezuela, o cualquier otro país en América Latina y el Caribe, ha sufrido un episodio de invasion militar en tiempos recientes, la población más pobre y vulnerable ha sido la más dañada por ello.
Como líderes de Iglesias que hemos caminado al lado de comunidades marginadas, le conminamos firmemente a abstenerse de ordenar cualquier incursión militar o intervención unilateral en Venezuela, y que apoye alternativas que afirmen el bienestar así como la autodeterminación del pueblo venezolano. Los gobiernos de México y Uruguay han sometido una propuesta para el diálogo entre las partes en controversia. Esta nueva iniciativa tiene el objetivo de relanzar un diálogo entre las partes en disputa, de manera que se evite cualquier desarrollo indeseable en el enfrentamiento político en Venezuela. Así como lo expresa un representante de esos países, “se necesita un nuevo mecanismo de diálogo para contribuir a la paz y a la estabilidad de Venezuela”. Los medios de comunicación han informado que ambos gobiernos [Mexico y Uruguay] han adoptado una posición no-intervencionista. Por tal razón, han decidido llamar a un diálogo inclusivo para resolver la situación delicada en Venezuela de una vez por todas. Más de diez países así como organismos internacionales, incluyendo a las Naciones Unidas, ya han dado su aval a esta propuesta. Otras organizaciones ecuménicas y de iglesias, tales como la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas, la Alianza de Iglesias Presbiterianas y Reformadas de América Latina y el Consejo Latinaomericano de Iglesias apoyan dicha iniciativa.
Como pueblo de Dios, apreciamos la integridad de cada ser humano y le invitamos a comprometerse seriamente con una solución pacífica a esta situación. Oramos para que los Estados Unidos no dirija o promueva ningún ataque militar a Venezuela y que, en cambio, transite un camino de respeto, diálogo y reconciliación con el gobierno de Venezuela y sus opositores políticos. Debemos estar dispuestos a respetar y a participar en el esfuerzo internacional que se desarrolla en ruta a un acuerdo político y diplomático. También insistimos en que se cancele cualquier sanción económica unilateral en contra de Venezuela, habida cuenta de que ello no sirve a ningún otro propósito que el de vulnerar a aquellos que ya, de por sí, están sufriendo en extremo. Esto también afecta negativamente al ambiente político y social necesario para una solución pacífica de esta crisis en Venezuela.
Que Dios le guíe con sabiduría y discernimiento, a nombre del pueblo de Venezuela y de toda la Creación de Dios.
Cordialmente,
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Rev. Teresa Hord Owens |
Rev. Dr. John Dorhauer |
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Rev. Julia Brown Karimu |
Rev. Dr. James Moos |
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Rev. Angel L. Rivera-Agosto |