Agosto 2010 en español
El mensaje de la Resurrección alcanza todo el año
Que según su gran misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos…I Pedro 1: 3b
Recientemente volé al este de Timor por una semana para enseñarle a un grupo de predicadores laicos que estaban siendo preparados para administrar los sacramentos y proveer cuidado pastoral a muchos grupos pequeños de cristianos protestantes esparcidos por las montañas del este de Timor. La Iglesia Protestante del este de Timor (IPTL por su nombre en inglés) creció bastante durante la ocupación indonesa dada la presencia y dinero de los protestantes indoneses pero ahora es dejada con una estructura insostenible, Iglesias vacías en algunas áreas y cristianos pero no Iglesias en otras. Están en un largo proceso de muerte y resurrección y los Ministerios Globales han sido uno de los consortes más fieles en su lucha.
Del este de Timor volé a la isla de Ambon, donde trabajé con un programa de diversas fe de “Predicando la paz” el cual envuelve intercambios de púlpitos entre predicadores cristianos y musulmanes. Esta es una de las muchas respuestas creativas del pueblo de fe local al conflicto comunal devastador que dañó el área a principios de los años 2000. Trabajé con mi amigo Abidin, quien es el vice presidente del concilio musulmán en Ambon. El creció en un área donde los musulmanes y los cristianos han vivido en amistad por siglos y han pasado los últimos 10 años tratando de restaurar aquella amistad.
Como pueden ver, mucho de nuestro trabajo está siendo hecho en comunidades luego del conflicto. Mientras las iglesias a menudo son lentos para responder a los eventos sociales (igual que en la crisis original de hace 10 años) las Iglesias son buenas en proveer un compromiso a largo plazo y el cuidado necesario para restaurar esas comunidades a la vida. Las iglesias continúan tratando de sanar las heridas y escuchar las voces silentes de las víctimas.
No podemos pasar por alto el poder de la idea de la resurrección entre las comunidades cristianas traumatizadas en el este de Indonesia. Les da la fuerza para subsistir por un futuro diferente del que la historia les ha dictado por medio del terror y el dolor. Cuando trabajo con estas personas, estoy convencido de que el poder de la vida de Jesús no está confinado a “hace mucho tiempo y lejos” sino a una realidad muy presente.
Juntos oramos por la esperanza y fortaleza del pueblo fiel de Indonesia quienes han ayudado a sanar las heridas del trauma de muchos.
John Campbell-Nelson sirve como misionero de los Ministerios Globales como profesor con la Iglesia Evangélica del Oeste de Timor.