Drought in Nicaragua
During 2015 I met a farmer; she is supported by the Interchurch Center where I am serving. This woman managed to overcome times of drought that affected Nicaragua and still affect the Central American region due to climate change. Her story impressed me so much as an agronomist and volunteer that I wanted to share her story with you.
Mrs. Marta Gutierrez lives in Vanilla, it is a small community located west of Managua in an area called the dry corridor of Nicaragua. She has dedicated her life to farming to feed her family with the fruits obtained at each harvest.
The drought of the last two years has strongly affected the community where Mrs. Marta lives. She has lost all the crops and harvest, but this drought has not caused her to lose hope in farming. The first planting season in Nicaragua is from May to August, but the rains this year were delayed and arrived two months late. Finally arriving in June, but with little intensity there was not water to plant her crops. For this reason and the poor forecast, Mrs. Marta decided to grow onions irrigated by hand. Later with the support of CIEETS, she received a pump to use water from an underground well and thus irrigate her onions.
A friend of Mrs. Marta gave her a few onion seeds, planting and caring for the seedlings. Through hard work she was able to start her first two hundred plants. She managed to repeat this process in July, and during September transplanted them. Starting with a small experimental garden to test her new crop, she began watering the plants twice a day for two hours. She did this for three months – moving water with buckets from a watering hole a few hundred meters from the garden.
After this successful experiment, Mrs. Marta asked CIEETS for onion seeds to continue farming, and with their support cultivated five thousand plants. Mrs. Marta watered her plants for three months and was able to harvest a good crop – watered by hand and grown organically. With the onions, she managed to get money to buy food in the harvest she could not otherwise obtain. She wants to continue growing her onions or other crops, even if it requires the sacrifice of carrying every drop of water by hand, because she wants to stay on their land and hopes for further training and resources to support her family.
Dear brothers and sisters, let us pray for Nicaraguan families live off the land and water is an essential resource for survival, I encourage you to keep fervent in their congregations to pray for the volunteers who are serving around the world support the neediest families on the planet.
Durante el año 2015 conocí a una productora, ella es apoyada por el Centro Intereclesial de Estudios Teológicos y Sociales (CIEETS), donde estoy sirviendo. Esto marcó mucho mi vida como agrónoma sobre todo porque esta mujer logró sobreponerse a los tiempos de sequía que han afectado a Nicaragua y que dicho país sigue enfrentando desde hace un par de años debido al cambio climático. Es por esto que quiero compartir parte de su historia con ustedes.
Doña Marta Gutiérrez vive en la Vainilla, una pequeña comunidad ubicada en el corredor seco de Nicaragua. Ella ha dedicado su vida a cultivar la tierra para alimentar a su familia con los frutos de la tierra obtenidos cada cosecha.
La sequía de los últimos dos años ha afectado fuertemente a la comunidad donde vive la señora Marta. Ella ha perdido todas las siembras y no ha podido cosechar. Ahora bien, esta situación de falta de agua no ha sido un factor para hacer perder sus esperanzas en lo que mejor sabe hacer, que es cultivar la tierra. La primera época de siembra en Nicaragua corresponde a los meses de mayo a agosto, pero las lluvias llegaron dos meses más tarde, iniciándose en Junio con poca intensidad y sin la cantidad suficiente de agua para sembrar. Por esta razón, y con este pronóstico negativo, la señora Marta decidió cultivar cebollas, regándolas a mano. Gracias al apoyo de CIEETS, obtuvo una bomba para sacar agua desde un pozo subterráneo y de esta forma regar sus cebollas.
Un amigo de doña Marta le regaló un poco de semillas. Con ellas realizó el almácigo, obteniendo doscientas plantas en su primer almácigo, de las cuales logró reproducir en el mes de julio, obteniendo doscientas plantas germinadas. En el mes de septiembre, cuando las plantas tenían tres hojas, comenzó a trasplantarlas a una pequeña huerta experimental para probar su nuevo cultivo. Comenzó regando sus plantas dos veces al día por dos horas, trasladando el agua con baldes desde su pozo de agua a unos 100 metros de la huerta.
Luego de su experimento positivo, la señora Marta pidió semillas de cebollas a CIEETS para continuar cultivando. De ahí, ella elaboró cinco mil plantas de cebollas. Doña Marta estuvo regando sus plantas durante tres meses y logró cosechar buenos frutos en sus tres manzanas cultivadas de manera orgánica, y regadas a mano. Con las cebollas, logró obtener recursos para comprar los alimentos que en la cosecha no pudo obtener. Ella quiere seguir cultivando sus cebollas u otros cultivos aunque sea sacrificado acarrear el agua para regarlas porque ella desea permanecer en su terreno y espera seguir capacitándose y obteniendo recursos para sustentar a su familia.
Queridos hermanos y hermanas, sigamos orando por las familias Nicaragüenses que viven de la tierra y que el agua es un recurso esencial para su sobrevivencia. Les aliento a seguir fervientes en sus congregaciones orando por los voluntarios y voluntarias que estamos sirviendo alrededor del mundo apoyando a las familias más necesitadas del planeta.
Magyolene Rodriguez serves with the Convention of Churches Christian Mission of Nicaragua. She serves in environmental education, food security, and conflict transformation. Her appointment is made possible by your gifts to Disciples Mission Fund, Our Churches Wider Mission, and your special gifts.