Mayo 2021: Espíritus inmundos

“Y todos se asombraron, de tal manera que discutían entre sí, diciendo: ¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es esta, que con autoridad manda aun a los espíritus inmundos, y le obedecen?” Marcos 1:27

Aquí en Timor creemos en los espíritus inmundos. Si un niño se enferma a menudo, si las cosechas y el ganado no prosperan, si nada parece ir bien en un hogar, los malos espíritus son siempre una posible explicación. Hace años, nuestra iglesia adquirió la tierra en la que se encuentra ahora el seminario porque se decía que estaba embrujada, el sitio de “aguas negras” que albergan espíritus peligrosos. Fue un trato triple: la tierra era barata, incluía un manantial para abastecer de agua a la escuela y la iglesia pudo dar testimonio de que creemos que Cristo es más fuerte que los espíritus inmundos. “Inmundo” es una buena palabra porque la mayoría de la gente ve a estos espíritus como fuerzas de la naturaleza que no son necesariamente malas, pero que hacen daño cuando están fuera de lugar. La suciedad en la alfombra es “impura”, pero la suciedad en el jardín es “fértil”, incluso si es la misma suciedad.

Este entendimiento resultó útil cuando la iglesia enfrentó preguntas sobre el coronavirus: “¿Es el virus un castigo de Dios?” No, respondió la iglesia, es parte de la creación de Dios. Pero pertenece al bosque del que vino, no entre los humanos. GMIT, la Iglesia Evangélica Protestante de Timor, ha trabajado arduamente para educar y brindar ayuda y consuelo a las personas durante este momento difícil, sin demonizar el virus ni ofrecer una falsa sensación de seguridad. Los más afectados han sido los pobres de las zonas urbanas, que dependen de sus ingresos diarios para la alimentación y la vivienda. El ministerio detrás de una máscara y desde la distancia nos ha desafiado a todos a ser más creativos, pero sin dudar ni una sola vez que Jesús “manda incluso a los espíritus inmundos, y ellos le obedecen”.

John Campbell-Nelson sirve en la Iglesia Evangélica Protestante de Timor. Su nombramiento es posible por sus ofrendas al Fondo de Misiones Discípulos, la misión de la iglesia en pleno y sus ofrendas especiales.