Pray with Mexico, Sunday, July 24, 2022

Pray with Mexico, Sunday, July 24, 2022

Pray with Mexico, July 24, 2021

Lectionary Selection:  Luke 11:1-13

Prayers for Mexico

“Lord, teach us to pray,” a request that is a prayer in itself, when we humbly recognize our vital need to return to our original source, to the One who created us and loves us as a father or a mother.

Jesus taught us that prayer is the human word that responds to that divine Word that embraces us, encourages us, and confronts us. Therefore, in prayer heaven bursts on earth and God’s name is sanctified; his Kingdom comes and is among us and we ask for his will to be done.

Prayer challenges us to live the ethical dimension of the Kingdom: that in loving solidarity we share the bread that we receive daily as a gift from God; that in the practice of mercy and justice we forgive others their debts and offenses; that recognizing our weaknesses we take refuge in the one who can keep us and deliver us from evil or from doing evil to others.

“Lord, teach us to pray” because we do not want to pray from our selfishness asking for that which does not contribute to the fullness of life of the human community and of your creation.

“Lord, teach us to pray” because if you teach us we will learn from your sensitivity and it will be worthwhile to live in prayer.

“Lord, teach us to pray” so that we may enjoy your company and friendship knowing that we can bring before you our burdens and weariness.

“Lord, teach us to pray” so that we may participate in your mission in the world and collaborate in the establishment of your Kingdom of justice and peace.

Thank you for teaching us to pray with our feet on the ground and our arms stretched out towards heaven. We sanctify your name in every act of justice and mercy, we affirm the coming of your Kingdom by working for the establishment of peace, and your will is done when we give ourselves into your hands with trust and hope.

“Lord, teach us to pray.” Amen.

Mission Stewardship Moment from Mexico

The experience of prayer that our Lord taught us fills us with joy and hope to be able to pray or continue praying with the churches and seminaries in Mexico. Since we began our missionary service in this beautiful country, we have had the opportunity to participate in different days of prayer, many of them to ask and act in favor of specific groups that are in vulnerable situations or living under different types of violence.

United in prayer with the seminaries of the Theological Community of Mexico and with the churches that participate in these ecumenical spaces, we want to present the thanksgiving and petitions that have been generated and continue to be generated in these days of prayer:

We thank God for:

  • The churches and their institutions that continue to proclaim the Gospel in words, gestures, and actions of liberation.
  • For the signs of hope that are generated by social movements that work to improve the quality of life in many impoverished communities.
  • For the projects and initiatives of the churches in favor of vulnerable sectors or communities: women, children, migrants, refugees, and indigenous people.
  • For the sister churches and their ministries that accompany in prayer and with diverse resources the different educational and social projects of the seminaries and churches in Mexico.
  • For the natural wealth and cultural diversity that reminds us that the full life of the Gospel is for everyone without exclusion or discrimination.

We pray for:

  • Communities, families, and individuals who live under the threat of insecurity and violence. Mexico has some of the most dangerous cities in the world as a result of delinquency and organized crime.
  • The high level of impoverishment that many families and communities experience on a daily basis, especially in rural areas and in the settlements of large cities.
  • Socio-economic inequalities that translate into a lack of opportunities, especially on the basis of gender, territory, cultural identity, religion, and migratory status.
  • The levels of corruption present in different strata of Mexican society, generating high levels of distrust in public institutions and increasing citizen insecurity.
  • The administration of justice so that every person can have access to an impartial justice system where their fundamental rights are respected.
  • We pray with Mexico in the confidence that God hears and answers our prayers: “And I say to you, ask, and it will be given to you; seek, and you will find; knock, and it will be opened to you.” Lk. 11:9.

Prayer and Mission Moment by Carlos Sediles

Mission Partners in Mexico:

More about Mexico

Global Ministries Mission Co-worker in Mexico:
Carlos Sediles-Real serves the Theological Community of Mexico (CTdeM). His appointment is made possible by your gifts to Disciples Mission Fund, Our Church’s Wider Mission, and your special gifts.

En español

Lectionary Selection:  Luke 11:1-13

Prayers for Mexico:  

“Señor, enséñanos a orar”, una solicitud que es una oración en sí misma, cuando reconocemos con humildad nuestra necesidad vital de volver a nuestra fuente original, a aquel que nos creó y nos ama como un padre o como una madre.

Jesús nos enseñó que la oración es la palabra humano que responde a esa Palabra divina que nos abraza, nos anima y nos confronta. Por eso, en la oración el cielo irrumpe en la tierra y el nombre de Dios es santificado, su Reino viene y esta entre nosotros, y pedimos que su voluntad se realice.

La oración nos desafía a vivir la dimensión ética del Reino: que con amor solidario compartamos el pan que cotidianamente recibimos como don de Dios; que en la practica de la misericordia y la justicia perdonemos a otros sus deudas y ofensas; que reconociendo nuestras debilidades nos refugiemos en aquel que nos puede guardar y librar del mal o de hacer el mal a otros.

“Señor, enséñanos a orar”, porque no queremos orar desde nuestro egoísmo pidiendo aquello que no abona a la plenitud de vida de la comunidad humana y de tu creación.

“Señor, enséñanos a orar”, porque si tu nos enseñas aprenderemos de tu sensibilidad y valdrá la pena vivir en oración.

“Señor, enséñanos a orar”, para disfrutar de tu compañía y amistad sabiendo que podemos traer ante ti nuestras cargas y cansancio.

“Señor, enséñanos a orar”, para participar de tu misión en el mundo y colaborar en el establecimiento de tu Reino de justicia y paz.

Gracias por enseñarnos a orar con los pies en la tierra y los brazos extendidos hacia el cielo. Santificamos tu nombre en cada acto de justicia y misericordia, afirmamos la llegada de tu Reino trabajando por el establecimiento de la paz, y tu voluntad se hace cuando nos entregamos en tus manos con confianza y esperanza.

“Señor, enséñanos a orar”, Amén.

Mission Stewardship Moment from Mexico:

Desde la experiencia de oración que nos enseñó nuestro Señor, nos llena de alegría y esperanza poder orar o seguir orando con las iglesias y seminarios en México. Desde que iniciamos nuestro servicio misionero en este bello país, hemos tenido la oportunidad de participar en distintas jornadas de oración, muchas de ellas para pedir y actuar a favor de grupos específicos que se encuentran en situación de vulnerabilidad o viviendo bajo diferentes tipos de violencia.

Unidos en oración con los seminarios de la Comunidad Teológica de México y con las iglesias que participan de estos espacios ecuménicos, queremos presentar las acciones de gracias y peticiones que se han generado y se siguen generando en estas jornadas de oración:

Agradecemos a Dios por:

1.- Las iglesias y sus instituciones que continúan proclamando el Evangelio en palabras, gestos y acciones de liberación.

2.- Por los signos de esperanza que se generan a partir de movimientos sociales que trabajan por mejorar la calidad de vida en muchas comunidades empobrecidas.

3.- Por los proyectos e iniciativas de las iglesias a favor de sectores o comunidades vulnerables: mujeres, niñez, migrantes, refugiados, indígenas.

4.- Por las iglesias hermanas y sus ministerios que acompañan en oración y con diversos recursos los diferentes proyectos educativos y sociales de los seminarios y las iglesias en México.

5.- Por la riqueza natural y la diversidad cultural que nos recuerda que la vida plena del Evangelio es para todos y todas sin exclusiones ni discriminaciones.

Pedimos por:

1.- Las comunidades, familias y personas que viven bajo la amenaza de la inseguridad y la violencia. México tiene algunas ciudades incluidas entre las más peligrosas del mundo como resultado de la delincuencia y el crimen organizado.

2.- El elevado nivel de empobrecimiento que experimentan día a día muchas familias y comunidades especialmente en las zonas rurales y en los asentamientos de las grandes ciudades.

3.- Las desigualdades socio – económicas que se traducen en la falta de oportunidades especialmente por motivo de género, territorio, identidad cultural, religión y situación migratoria.

4.- Los niveles de corrupción presente en diferentes estratos de la sociedad mexicana generando altos niveles de desconfianza en las instituciones públicas y aumentando la inseguridad ciudadana.

5.- La administración de la justicia para que toda persona pueda tener acceso a un sistema de justicia imparcial donde se respeten sus derechos fundamentales.

Oramos con México en la confianza de que Dios escucha y responde a nuestras oraciones: “Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.” Lc. 11:9.

Prayer and Mission Moment by Carlos Sediles